La tutela efectiva se trata de un derecho que no sólo reconoce la Constitución Española, sino que se encuentra recogido entre los Derechos Fundamentales de nuestro ordenamiento jurídico. Nuestros abogados en asuntos familiares y especialistas en otras materias relacionadas con la familia te explican en qué consiste.
Derecho a la tutela judicial efectiva
En concreto, la tutela judicial efectiva hace referencia al derecho que tiene toda persona para invocar la actividad de los órganos judiciales, para así defender sus intereses legítimos.
Esta actividad ha de derivar en una resolución fundamentada en derecho, al finalizar un proceso justo. Esta resolución tiene que ser cumplida en cualquier caso, aunque no se exige que resulte favorable a los deseos de quien inicia el procedimiento para ser observado el derecho a la tutela efectiva.
Asimismo, este derecho implica la obligación de que las resoluciones judiciales estén suficientemente motivadas. En otras palabras, que expliquen con detalles las razones en las que se basan para tomar su decisión.
Dicha explicación ha de dejar clara la falta de arbitrariedad. De forma que se considerará vulnerado el derecho de tutela efectiva cuando una resolución:
- No posea tal motivación.
- Sí la contenga, pero sólo en apariencia.
Es decir, hablamos bien de la ausencia de motivación o bien de un razonamiento irrazonable.
Artículo 24 de la Constitución Española
El artículo 24 de nuestra constitución dice así:
- «Todas las personas tienen derecho a obtener la tutela efectiva de los jueces y tribunales en el ejercicio de sus derechos e intereses legítimos, sin que, en ningún caso, pueda producirse indefensión.»
- «Asimismo, todos tienen derecho al Juez ordinario predeterminado por la ley, a la defensa y a la asistencia de letrado, a ser informados de la acusación formulada contra ellos, a un proceso público sin dilaciones indebidas y con todas las garantías, a utilizar los medios de prueba pertinentes para su defensa, a no declarar contra sí mismos, a no confesarse culpables y a la presunción de inocencia.»
Además, señala: «La ley regulará los casos en que, por razón de parentesco o de secreto profesional, no se estará obligado a declarar sobre hechos presuntamente delictivos.»
Titulares de este derecho
A priori, son titulares todos los que puedan ser sujetos de derechos y deberes. Es decir, nos referimos a todos los ciudadanos (españoles o no), así como a las personas jurídicas privadas y a los entes públicos.
En cuanto a las personas públicas, puede invocarse la tutela efectiva en casos excepcionales, teniendo en cuenta la posición de privilegio que le brinda el ordenamiento jurídico en el ejercicio de su actividad.
El Tribunal Constitucional ha establecido los supuestos en los que la Administración podría invocar la violación del derecho a la tutela judicial efectiva. De manera resumida, hablamos de aquellos casos en los que su actuación busca la defensa de los intereses generales. También sucede en litigios donde su situación procesal resulta análoga a la de los particulares, en consecuencia, no disfrutan de privilegios o de prerrogativas especiales. Entre otros ejemplos.
Materialización de la tutela judicial
El derecho a la tutela efectiva toma forma en estos derechos concretos:
- El derecho de cualquier persona a acceder a la justicia para defender sus derechos e intereses legítimos que resulten vulnerados.
- El derecho a que el procedimiento judicial cumpla con las garantías procesales y, en consecuencia, puedan presentarse las pruebas y las declaraciones que demuestren y constaten la vulneración por la que se pretende resarcimiento.
- El derecho a que los jueces y los tribunales ofrezcan una respuesta motivada en cuanto a las pretensiones, basada en el derecho y en un plazo razonable.
- Derecho a recurrir el fallo obtenido ante el órgano jurisdiccional, correspondiente en tiempo y forma, cuando la resolución sea considerada desfavorable.
- Derecho a que se lleve a cabo el fallo recogido en la sentencia, para asegurar la efectividad de las decisiones judiciales.
Éstos son los tipos de tutela judicial efectiva.
Conclusión
En resumen, la tutela efectiva se trata de un derecho básico por el que se garantiza que cualquier persona pueda iniciar un procedimiento legal para pedir que se repare la vulneración de sus derechos.
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